· Responsabilidad Corporativa
Una de las causas de la Polución en las empresas es que estas empresas no tienen creencias o valores establecidos sobre lo que consideran correcto o incorrecto para la cultura organizacional, si no tienen una estructura de toma de decisiones no podrán resolver temas de contaminación, ya que no disponen de una estructura corporativa interna que este alineada con las metas de la organización y con los intereses de los grupos de interés involucrados. Cuando no se emplean los recursos naturales con responsabilidad hacia la sociedad se ocasionan problemas, puesto que todas sus actividades corporativas tienen un impacto en la sociedad y al no priorizar temas como la polución no saben qué hacer cuando se presentan escenarios en los cuales se debe tomar una decisión concreta que hará que se genere contaminación o no.
· Teoría de los Stake holders
En la actualidad existen diversas empresas que han invertido en el Perú con muchas ganas de recuperar y hacer crecer su inversión, ya sea el caso de mineras, empresas industriales, etc. Sin embargo, si no toman en cuenta que al llegar a establecerse en alguna zona van a encontrarse con personas que estarán involucradas directa o indirectamente van a conllevar a diversos problemas. Empresas mineras o industriales que ingresan a comunidades deben tomar en cuenta que deben asumir responsabilidades sociales para lograr satisfacer sus propios intereses, ya que existen ciertos grupos de interés (stake holders), quienes se pueden ver afectados o beneficiados dependiendo de las acciones que tome la empresa. Por lo general, esos grupos de interés están conformados por la comunidad local, los clientes, empleados, proveedores, accionistas, etc. Y se debe tomar en cuenta que cada uno de estos grupos tiene distintos intereses y se tiene que tener consideración con todos ellos. La Polución se genera cuando las empresas no tienen conciencia social sobre sus acciones (usar sustancias tóxicas, construcciones en zonas residencias, acabar con la biodiversidad) y sólo buscan beneficiarse y no asumen las consecuencias de sus actos, esto también se conoce como externalidad negativa. En el caso de Yanacocha, que se trató anteriormente, no se supo llevar una relación adecuada con los stake holders y ello ocasionó accidentes que perjudicaron a comunidades, empleados y accionistas y no se promovieron mejoras ni soluciones que hubiera logrado que no se genere graves problemas de polución.
· Utilitarismo
El utilitarismo nos dice que las decisiones morales deben basarse en la cantidad de placer o dolor que causen las opciones y que las preferencias deben dirigirse hacia lo que produzca más beneficios para todas las personas involucradas. Una de las causas de la polución es que no se sigue al pie de la letra ese principio, ya que los grandes intereses económicos que se encuentran dentro de la industria imposibilita que se pueda hacer un análisis ético y se piense en todas las partes involucradas y si esto traería beneficios o perjuicios. El problema radica cuando las empresas, al realizar el análisis, no tienen una visión objetiva de la realidad y ponen como prioridad sus intereses y no las del bien común, si se sigue el principio de “la mayor felicidad” debe tomarse en cuenta a todos los involucrados y analizar sus intereses y las consecuencias de sus actos.
En muchos casos las empresas analizan sus acciones diciendo que sería beneficioso para la mayor cantidad de gente y no se ponen a pensar en las consecuencias ambientales que esas acciones podrían traer, no consideran que evitar la polución debería ser un tema primordial al realizar el análisis de costo/beneficio.
· Áreas grises
En el Perú existen muchas empresas que tienen los permisos legales para ejercer sus actividades con todos los requerimientos necesarios. Al tratarse de un tema como la polución, existen muchos problemas a la hora de iniciar estas actividades, ya sea por iniciar proyectos mineros o por construcciones de nuevos edificios, supermercados, etc. Otra de las causas de la contaminación es que las empresas no evalúan las alternativas que tienen, y sólo por el hecho de tener los permisos inician proyectos, incluso en contra de las comunidades de la zona, esto genera malestar en ellos y desconfianza. Las empresas no responden correctamente a sus requerimientos y al no existir ninguna restricción por parte de las autoridades competentes no tienen ningún incentivo para actuar en beneficio de todos los involucrados y sólo se preocupan en sus propios intereses.
Es por ello que al no existir una ley concreta que proteja al medio ambiente, las empresas seguirán sus “instintos” y verán si les conviene seguir con el proyecto, evaluar las consecuencias y realizar un análisis costo/beneficio para determinar qué acción es la más adecuada, el problema empieza cuando los temas medio ambientales no son tomados en cuenta con la debida seriedad que se merecen, ya que muchas empresas buscan su bienestar económico y creen que los recursos naturales están para servir a las empresas y tampoco toman en consideración como podría perjudicar la contaminación a los pobladores de la zona.
